El síndrome de dificultad respiratoria del adulto
(SDRA) constituye un verdadero reto para todo médico que en su práctica
profesional tenga contacto con pacientes graves. Su prevención debe ser el
objetivo prioritario a alcanzar en los pacientes de riesgo pues, una vez
instalado, la mortalidad esperable oscila entre 20 y 90%, según las series, con
una media de 50%.
Sinonimia
El SDRA es conocido actualmente hasta por 27
sinónimos. El término más empleado es el original, dado por Petty y Ashbaugh,
de Síndrome de Distress Respiratorio del
Adulto, para designar a un conjunto de manifestaciones clínicas,
radigráficas, gasométricas y sobre todo anatomopatológicas, muy similares al síndrome de distress respiratorio del niño
(síndrome de la membrana hialina del recién nacido).
La misma abundante sinonimia es muestra de cuánto
aún falta por esclarecer en el mecanismo de producción del síndrome. Si nos
atenemos a terminologías que implican el total compromiso respiratorio,
emplearemos:
-Insuficiencia respiratoria progresiva
-Edema pulmonar no cardiogénico
-Atelectasia congestiva
-Displasia broncoalveolar, etc.
Si nos atenemos a la condición aparentemente
etiológica, tendremos:
-Sindrome de toxicidad por oxígeno
-Pulmón de shock
-Pulmón de transplante, etc.
Definición
Para algunos autores la definición de SDRA es muy
breve y concreta: lesión difusa del pulmón que ocasiona edema no cardiogénico
(no hidrostático) e insuficiencia respiratoria aguda.
Para otros, la definición es mucho más compleja:
cambios clínicos, patofisiológicos y anatomopatológicos que resultan del edema
pulmonar no hidrostático debido a permeabilidad capilar aumentada como
consecuencia de un daño difuso en la membrana alveolocapilar del pulmón.
Como vemos, estas y en general todas las definiciones
del SDRA, adolecen de insuficiencias
y pretenden abarcar tanto aspectos etiológicos como anatómicos, clínicos, etc.
La siguiente, nos sitúa de lleno en la cuestión:
Cuadro clínico, hemogasométrico, mecánico y radiológico que expresa el fracaso pulmonar de brindar una correcta oxigenación tisular y cuyos elementos más representativos son la hipoxia creciente por edema intersticial y/o alveolar y la disminución de la compliancia pulmonar.
Etiología
Dada la enorme dificultad que significa agrupar tantas
y tan variadas condiciones en una sóla entidad, muchos autores recomiendan
separar las insuficiencias respiratorias en grupos etiológicos.
1.- Condiciones que afectan directamente al pulmón:
a) Condiciones de broncoaspiración e inhalación de
gases tóxicos:
·
Broncoaspiración
de contenido gástrico
Vómitos en pacientes con toma sensorial (AVE, anestesiados,
trauma craneal, ahogamiento incompleto, síndrome
de Mendelson, etc). La importancia de estos casos radica en el volumen de
lo aspirado, pH del líquido aspirado, características del líquido). El volumen
puede ser tal que provoque un desplazamiento agudo del contenido aéreo de las
vías respiratorias, provocando una verdadera asfixia, así como lesiones
cualitativas y cuantitativas en el surfactante. El pH menor de 2,3 presagia daño severo tanto al endotelio capilar como
al epitelio alveolar, producto de una grave reacción química debida al
elevado contenido de cloro
·
Brocoaspiración
en el síndrome de ahogamiento incompleto
·
Inhalación
de gases tóxicos y vapores irritantes
b) Infecciones pulmonares:
c) Causas que afectan indirectamente al pulmón:
·
Pulmón
de catecolaminas
·
Pulmón
de shock de cualquier etiología
·
Alteraciones
de la sangre del capilar pulmonar
·
Fármacos
·
Otras
causas con mecanismos menos conocidos
d) Causa idiopática (10%).