La apendicectomía
profiláctica es la resección de un apéndice, supuestamente sano, en el curso de
una laparotomía (apertura de la cavidad abdominal; también puede ser por acceso
laparoscópico) practicada para corregir un proceso patológico que no asiente en
dicho órgano, con el fin de prevenir la aparición de una apendicitis aguda con
su correspondiente morbilidad y mortalidad, o las posibles dudas diagnósticas
con esta entidad, en el futuro.
Esta operación
también es conocida con otros nombres como: Apendicectomía incidental,
complementaria, preventiva.
Si el Cirujano
General o el Cirujano Pediátrico ha intervenido un paciente que llevó al salón
de operaciones con el diagnóstico de Apendicitis Aguda y durante el
transoperatorio descubre que el paciente tiene un apéndice aparentemente sano,
y no encuentra causa que justifique el cuadro que motivo al diagnóstico erróneo,
debe de realizar la apendicectomía para evitar errores diagnósticos futuros. Actuará
de igual manera si dentro de las causas que provocaron el cuadro aparecen
entidades que no son diferenciables hasta la operación misma: Adenitis
Mesentérica (realizará biopsia ganglionar y apendicectomía), epiploitis,
Diverticulitis de Meckel (en esta queda a juicio del facultativo en dependencia
del tratamiento que le dé al divertículo y demás condiciones del paciente).
Lamentablemente no
hay un consenso para indicaciones precisas de esta operación, pero de manera
general se aceptan las mismas en varios países (se enumeran después), y si se
está de acuerdo en condiciones no debe de realizarse.
Siempre debe de ser
informado el paciente y la familia al que se le realice esta intervención, a
fin de evitar errores diagnósticos futuros u operaciones innecesarias.
Indicaciones ¿Cuándo debe hacerse?
1.- Durante la
realización de operaciones electivas o programadas tales como:
-
Laparotomía infraumbilical, cirugía de mínimo acceso del hemiabdomen inferior.
-
Cualquier otra laparotomía que brinde un acceso fácil al apéndice.
-
Herniorrafia incisional infraumbilical.
-
Herniorrafia inguinal o crural derecha.
2.- Durante la
realización de operaciones urgentes:
-
Cuando la laparotomía no muestre ninguna enfermedad evidente.
-
Cuando la laparotomía evidencie una afección aguda (Adenitis mesentérica,
anexitis aguda) que requiera solo tratamiento médico.
-
Invaginación intestinal en el niño. En dependencia de la gravedad del paciente.
- Malrotación
digestiva en el niño.
-
Enteritis regional, cuando no tome el ciego.
-
Quiste torcido del ovario.
Contraindicaciones ¿Cuándo no debe realizarse?
Si en alguna de las
situaciones anteriores se corrobora o se sospecha las que se enuncian enseguida
no debe de realizarse la apendicectomía:
-
Operaciones urgentes en el que se encuentre proceso que requiera tratamiento
quirúrgico.
- Mal
estado general del paciente.
-
Operaciones por cáncer.
-
Operaciones en las que se encuentre algún proceso inflamatorio visceral o
cualquier grado de peritonitis y el apéndice no sea la causa.
-
Cuando la operación principal haya sido muy laboriosa.
-
Cuando el apéndice no sea fácilmente accesible.
-
Cuando sea necesario ampliar la incisión original.
-
Cuando se encuentre algún proceso séptico intrabdominal.
Consideraciones
y principios a tener en cuenta.
- Se
realizará al final de la operación original.
- La
exposición debe ser buena para garantizar un fácil acceso al apéndice.
- Se
asegurará la resección total del apéndice.
- Se
cumplirán las medidas de asepsia y antisepsia.
- Llevar
a cabo una buena técnica, garantizando la interrupción total de la
vascularización externa e intramural del apéndice.
- Se
informará adecuadamente al paciente y sus familiares de que ha sido extirpado
el apéndice.
- Se
enviara la pieza a anatomía patológica para el análisis de la misma, aclarando
al patólogo que la extirpación fue profiláctica.