Infección aguda del parénquima
pulmonar que afecta a los espacios alveolares y al tejido intersticial. La neumonía (neumonitis) puede afectar a todo un lóbulo (neumonía lobar),
un segmento del mismo (neumonía segmentaria o lobulillar), a los alvéolos
contiguos a un bronquio (bronconeumonía) o al tejido intersticial (neumonía
intersticial). Esta clasificación se suele basar en los hallazgos radiológicos.
Etiología
La causa más frecuente de neumonía en pacientes >30
años son las bacterias, destacando Streptococcus pneumoniae como la más
frecuente. Otros patógenos son las bacterias anaerobias, Staphylococcus
aureus, Haemophilus influenzae, Chlamydia pneumoniae, C. psittaci, C.
trachomatis, Moraxella (Branhamella) catarrhalis, Legionella pneumophila,
Klebsiella pneumoniae y otros bacilos gramnegativos. Mycoplasma
pneumoniae, un organismo parecido a una bacteria, afecta de forma
especialmente frecuente a niños mayores y adultos jóvenes, sobre todo en
primavera. Los principales patógenos pulmonares en los lactantes y los niños
son los virus: el virus sincitial respiratorio, el virus parainfluenza y los
influenza A y B. Estos gérmenes también pueden producir una neumonía en
adultos, aunque en adultos sanos sólo son frecuentes las infecciones por
influenza A, en menos ocasiones por influenza B y, en muchas menos ocasiones,
por virus varicela-zóster. Otros gérmenes implicados son las bacterias
superiores como Nocardia y Actinomyces spp.; micobacterias,
incluidos Mycobacterium tuberculosis y las cepas atípicas (sobre todo M.
kansasii y M. avium-intracellulare); hongos, incluidos Histoplasma
capsulatum, Coccidioides immitis, Blastomyces dermatitidis, Cryptococcus
neoformans, Aspergillus fumigatus y Pneumocystis carinii; y
rickettsias, sobre todo Coxiella burnetii (fiebre Q).
Los mecanismos de diseminación suelen ser la inhalación
de gotas lo bastante pequeñas como para alcanzar los alvéolos y la aspiración
de secreciones de las vías aéreas altas. Otros mecanismos incluyen la
diseminación linfática o hematógena y la extensión directa a partir de una
infección contigua. Los factores predisponentes incluyen las infecciones
respiratorias altas por virus, el alcoholismo, la institucionalización, el
tabaco, la insuficiencia cardíaca, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica,
las edades extremas, la debilidad, la inmunosupresión (como en la diabetes
mellitus y la insuficiencia renal crónica), la alteración de la conciencia, la
disfagia y la exposición a agentes transmisibles.
Cuadro Clínico
Los síntomas típicos incluyen tos, fiebre y
producción de esputos, que se suele producir a lo largo de unos días y se
acompaña de pleuresía en ocasiones. La exploración física puede detectar
taquipnea y signos de consolidación, como estertores con sonidos respiratorios
bronquiales. Este síndrome se suele asociar con las infecciones bacterianas,
como los producidos por S. pneumoniae y H. influenzae.
Diagnóstico y Tratamiento
El diagnóstico se basa en los síntomas característicos
combinados con la infiltración en la radiografía.
Un 30 a un 50% de los pacientes no tienen patógenos
identificables a pesar de la impresión clínica de neumonía bacteriana. Aunque
el método consagrado con los años para detectar los patógenos bacterianos es el
cultivo de esputo, estas muestras suelen ser confusas porque la flora orofaríngea
normal puede contaminarlas cuando atraviesan las vías respiratorias altas. La
muestra más fiable se obtiene en lugares estériles, como la sangre en pacientes
con bacteriemia neumónica, o el derrame pleural en los pacientes con empiema.
Se necesitan técnicas especiales de cultivo, tinciones especiales, estudios
serológicos o biopsias pulmonares para reconocer algunos patógenos, como
micobacterias, micoplasmas, bacterias anaerobias, clamidias, virus, hongos,
legionella, rickettsias y parásitos.
El tratamiento se basa en el soporte respiratorio, que
incluye O2 cuando existe indicación, y en la antibioterapia, que se
selecciona en función de los resultados del Gram. Si no se realiza la tinción
de Gram o no permite llegar a un diagnóstico, se elige la antibioterapia en
función de las probabilidades determinadas por la edad del paciente, la
epidemiología, los factores de riesgo del enfermo y la gravedad del proceso.
Ver También:
- Realidades Sobre la Neumonía
- ¿Qué es la Neumonía?
- ¿Cuáles son los diferentes tipos de neumonía?
- ¿Qué causa la neumonía?
- ¿Cuáles son los factores de riesgo para la neumonía?
- ¿Cuáles son los síntomas y signos de neumonía?
- ¿Cómo se diagnostica la neumonía?
- ¿Cuál es el tratamiento de la neumonía?
- ¿Cuáles son las complicaciones de la neumonía?
- ¿Cuál es el pronóstico de la neumonía?
- ¿Se puede prevenir la neumonía? ¿Existe alguna vacuna?