Unos niveles bajos de vitamina D durante el embarazo se asocian con un
mayor riesgo de complicaciones en las futuras madres y de bajo peso al nacer en
los recién nacidos, halla un estudio reciente.
La investigación muestra una asociación, pero no prueba que una
insuficiencia de vitamina D provoque las complicaciones. Aún así, tomar
complementos de vitamina D podría ayudar a reducir esos riesgos, anotaron los
investigadores.
Los investigadores examinaron datos de 31 estudios publicados entre 1980
y 2012. Los estudios tenían entre 95 y 1,100 participantes.
El análisis reveló que las mujeres embarazadas con niveles bajos de
vitamina D eran más propensas a desarrollar diabetes gestacional (diabetes
durante el embarazo) y preeclampsia (hipertensión o proteína en la orina).
También eran más propensas a tener un bebé con bajo peso al nacer.
Los hallazgos, que aparecen en la edición en línea del 26 de marzo de la
revista BMJ, son "preocupantes", dada la evidencia
reciente de que los niveles bajos de vitamina D son comunes durante el
embarazo, sobre todo entre las vegetarianas, las mujeres con una exposición
limitada al sol y las que tienen una piel más oscura, señalaron los
investigadores.
El cuerpo produce vitamina D cuando la piel se expone a la luz del sol.
Otras fuentes incluyen los complementos y ciertos tipos de alimentos, como el
pescado. Usualmente, la leche se fortifica con vitamina D.
Aunque el estudio identificó una asociación significativa entre unos
niveles bajos de vitamina D y un mayor riesgo de complicaciones del embarazo,
se necesitan más investigaciones para determinar si unos programas para
aumentar los niveles de vitamina D en las mujeres embarazadas reducirían esos
riesgos, escribieron los investigadores, de la Universidad de Calgary, en
Canadá.
Los hallazgos respaldan el objetivo de asegurar que todas las mujeres
embarazadas tengan niveles adecuados de vitamina D, según un editorial
acompañante escrito por Robyn Lucas, del Centro Nacional de Epidemiología y
Salud de la Población de la Universidad Nacional de Australia, en Camberra.
Dijo que "los complementos de vitamina D, la dieta y la exposición
a la luz del sol" son medidas que "se deben usar en conjunto, con
cuidado". Todavía se necesitan estudios grandes y bien controlados para
aclarar la asociación entre un nivel bajo de vitamina D en el embarazo y las
complicaciones del nacimiento, señaló en un comunicado de prensa de la revista.
Artículo por HealthDay,
FUENTE: British Medical Journal, news
release, Marzo 26, 2013