Hernia Crural o Femoral


Es aquella que protruye a través del anillo crural (orificio que comunica la parte profunda de la región inguinal con la raíz del muslo, permitiendo el paso de la arteria y vena ilíaca externas y algunos linfáticos. Al pasar al muslo estos vasos reciben el nombre de femorales) y se exterio­riza por la parte alta e interna del muslo (algunas, muy raras, pasan por fuera de los vasos femorales o por el intersticio del ligamento de Gimbernat: hernia de Cloquet).


Frecuencia.

Se presenta más en la mujer (embarazos, amplitud de la pelvis) con una relación de 1/17. Es rara antes de la pubertad, siendo más propia de edades medias de la vida.


Etiología-Factores.

Similares a todas las herniasabdominales.


Diagnóstico.

a) Antecedentes

b) Sintomatología

Suele ser escasa o asintomática (sobre todo en pacientes obesas)
1) Ligeros trastornos digestivos: dispepsia y cólicos

c) Examen físico

1) Tumor semiesférico liso en la región superointerna del muslo que se continúa hacia el abdomen por  un ancho pedículo situado bajo la arcada crural. A veces no se reduce, no significando hernia irreducible, correspondiendo a un lipoma preherniario (precede por lo común a la hernia crural). Además, características clínicas comunes a todas las hernias

2) Signo de Asley y Cooper: Dolor acentuado en la raíz del muslo y náuseas a la extensión de la extremidad, aliviados con la flexión de la misma


Diagnóstico Diferencial.


2. Lipoma. No depresible, no reducible, no trans­mite el impulso de la tos, consistencia más firme,  desarrollo muy lento

3. Dilatación del cayado de la vena safena. Localización más baja que la arcada crural, es fácilmente  depresible, vaciándose y reapareciendo cuando cesa la presión, presencia de varices y de aumento de  volumen del miembro, transmisión de la vibración al percutir una variz próxima

4. Adenopatía crural. Consistencia firme, no se reduce, no adquiere impulso con la tos, linfangitis o adenitis asociadas

5. Hernia obturatriz o subpubiana. Muy rara, puede confun­dirse con la femoral por la localización y  sintomatología seme­jantes, presenta el Signo de Howship-Romberg: Dolor en la superficie interna del  muslo extendido hasta la rodilla, por compresión del nervio obturador

6. Absceso localizado: Igual que en la hernia inguinal.



Complicaciones.

Suele evolucionar con pocas molestias, pero puede adquirir gran volumen y dar considerables trastornos y complicaciones:

1) Estrangulación, con rapidez en producción de:

2) Necrosis   

3) Perforación


Tratamiento.