Como parte de una investigación en curso de la biología del envejecimiento, el mayor
factor de riesgo para la diabetes tipo 2
y otras enfermedades graves, los científicos del Joslin Diabetes Center han
identificado un nuevo factor (la transformación de microARN en tejido graso)
que desempeña un papel importante en el envejecimiento y la resistencia al
estrés. Este hallazgo puede conducir al desarrollo de tratamientos que aumenten
la resistencia al estrés y la longevidad
así como mejorar el metabolismo. Los hallazgos aparecen en la edición en línea
del 05 de septiembre de Cell Metabolism.
En los últimos años, se ha hecho evidente que las células
grasas (adipocitos) son más que
simples depositarios para almacenar la grasa. De hecho, las células grasas
segregan una serie de sustancias que influyen
en el metabolismo activamente y la inflamación sistémica. Estudios previos
han encontrado que la reducción de la masa grasa por la restricción calórica (CR) por medios quirúrgicos o genéticos pueden
promover la resistencia a la longevidad y el estrés en especies de primates.
Sin embargo, poco se sabe acerca de cómo la CR y la reducción de grasa producen
estos efectos beneficiosos. Este estudio investigó un tipo de mediador molecular,
[el cambio en microRNAs (miRNAs) y
las enzimas de procesamiento necesarias para hacerlos], que es influenciado por
el envejecimiento y revertido por la restricción calórica. Los miRNAs están
involucrados en la formación de ARN maduro.
Con base en estudios realizados con células humanas, ratones
y C. elegans (un gusano microscópico utilizado como organismo modelo para
estudios de envejecimiento), los investigadores demostraron que los niveles de miRNAs múltiples, disminuyen
en el tejido graso (adiposo) con la edad en las tres especies. Esto es debido a
una disminución en la enzima crítica requerida para convertir los pre-miRNAs a
miRNAs maduros. En el estudio en humanos, se comparó los niveles de miRNA en
preadipocitos (células grasas precusoras) de jóvenes, de mediana edad y
mayores, las personas de 70 años o más tenían los menores niveles de miARN.
"El hecho de que este cambio se produce en los seres humanos, ratones y
gusanos señala su importancia como un proceso general e importante", dice
el autor principal C. Ronald Kahn, MD, Director Académico del Centro Joslin
Diabetes Center y Mary K. Iacocca Profesor de Medicina en la Harvard Medical
School.
La restricción calórica, que ha demostrado prolongar la vida
útil y mejorar la resistencia al estrés en ratones y gusanos, y en el caso de
los ratones, restaura miRNAs a los niveles observados en los ratones jóvenes.
Por el contrario, la exposición de los adipocitos a factores importantes estresantes
asociados con el envejecimiento y enfermedades metabólicas, incluyendo agentes
tóxicos, los niveles de disminuyeron. Los ratones y gusanos diseñados para
tener disminución de la expresión en la grasa, mostraron una mayor sensibilidad
al estrés, un signo de envejecimiento prematuro. Por el contrario, gusanos
diseñados para "sobreexpresar" en el intestino (el equivalente de
tejido adiposo en gusanos) tenían mayor resistencia al estrés y han vivido más.
En general, estos estudios mostraron que la regulación de los
genes de miARN procesados en los tejidos adiposos relacionados, desempeña un
papel importante en la longevidad y la capacidad de un organismo para responder
al estrés relacionado con la edad y el medio ambiente. "Este estudio
apunta a un mecanismo totalmente nuevo por el cual la grasa puede afectar la
vida útil y es la primera vez que alguien ha mirado la grasa y los miRNAs como
factores de longevidad", según el co-autor Keith T. Blackwell, MD, PhD,
co- jefe de la Joslin's Section on Islet Cell and Regenerative Biology y
Profesor de Patología en la Harvard Medical School.
Sobre la base de este estudio, Blackwell sugiere que
"encontrar formas de mejorar el procesamiento miARN para mantener los
niveles de miARN durante el envejecimiento podría tener un papel en la
protección contra las tensiones de la vida cotidiana y el desarrollo de la edad
así como la enfermedad relacionada con el estrés."
El Dr. Kahn y los investigadores del estudio están trabajando
en maneras de controlar los niveles de miRNA genéticamente en los tejidos
grasos de los ratones, para crear modelos que son más o menos resistentes al
estrés. "Nos encantaría encontrar fármacos que imiten esta manipulación
genética para producir un efecto beneficioso", dice el Dr. Kahn. "Si
podemos entender mejor la biología del envejecimiento, también podemos entender
cómo la edad impacta la diabetes", dice Kahn.
Este Estudio incluye a los co-autores Marcelo A. Mori,
Raghavan Prashant, Boucher Jeremie, Stacey Robida Stubbs, Macotela Yazmin,
Steven J. Russell, y T. Keith Blackwell de Joslin y James L. Kirkland y Thomas
Thomou de la Clínica Mayo.
Fuente: Marcelo A. Mori,
Prashant Raghavan, Thomas Thomou, Jeremie Boucher, Stacey Robida-Stubbs, Yazmin
Macotela, Steven J. Russell, James L. Kirkland, T. Keith
Blackwell, C. Ronald Kahn. Role of
MicroRNA Processing in Adipose Tissue in Stress Defense and Longevity.Cell Metabolism, 2012; 16 (3): 336 DOI:10.1016/j.cmet.2012.07.017